domingo, 24 de febrero de 2008

Desastre

Sucesión de acontecimientos típica para un sábado en el que el Etxebarri juega fuera. Madrugón relativo motivado por la imperiosa necesidad de comer pronto (muchas veces venciendo, incluso, a la falta de hambre); espera previa a un viaje largo durante la hora de la siesta, conocedores de que visitamos un campo de arena (en el año 2008, sí, todavía quedan). Llegamos allí, vemos a los habituales impresentables de Zaldíbar, siempre los mismos, que pesados, que gente más rara, que encima se creen en posesión del lujo de calificarnos de marrulleros, ¿a nosotros?.
Comienza el prepartido, y una noticia que, en cualquier otra ocasión, hubiera sentado como un patada en donde la espalda pierde su casto nombre, ayer sonó a una relajación momentánea. Sí, estaba en el banquillo, no especialmente contento por ello, pero tampoco decepcionado. Sabía de mis escasas cualidades para jugar en un campo de semejante calaña.
Lo del resultado, no hace falta ni recordarlo, a quien le interese puede consultarlo vía Messenger, aunque creo que el título refleja a la perfección lo acontecido. Desastre (DESASTRE) en mayúsculas, con una actuación que supera el ridículo de desplazamientos anteriores.
Hacía falta algo, una charla coloquial en el más cercano local cerrado, que intentara poner fin a este despropósito que nos persigue siempre que nos alejamos del Municipal. Casualmente, encontramos un Gaztetxe frente a la caja de cerillas (vale lo reconozco, la visita estaba concertada desde principios de semana). Como si de una reunión de alcohólicos anónimos se tratara, y rebautizando el nombre a "Futbolistas frustrados" entonamos el "mea culpa" y nos propusimos golear al Begoña en el próximo partido. ¿Será el colista el que pague los platos que se han ido rompienso sábado sí, sábado no?.
Viaje de vuelta, de noche. Menos mal que es sábado, pensábamos. Y, efectivamente, no me gustaría pensar como hubiera sido esta debacle un domingo a la tarde, sin posibilidad de ahogar las penas en kalimotxo.
¿Y cómo fue la noche os preguntaréis? Pues hablando de rutina, creo que no es necesario buscar otro adjetivo. Me resulta facilísmo explicar, hoy, como transcurrió la noche de ayer, y con 2 palabras me considero capaz de resumirlo. Sí, las palabras son "como" y "siempre", que si las juntamos obtenemos un decepcionante "como siempre" que servirá de precedente a una cena ya concertada para la semana que viene. Y tras este momento de ridícula suma y clara demostración de no tener nada más que escribir doy paso a la postdata.

P.D. Sabemos que cuando el Etxebarri pierde u obtiene un resultado negativo, el Athletic copia todos nuestros males. Hoy me muestro confiado y apuesto por una victoria que nos de tranquilidad. Y sí, tal y como me propuso ayer Txaber, no tardaré mucho en reflexionar sobre la ruptura de esta estadística de la que hablo.

2 comentarios:

txa dijo...

Estadística que se prolonga una semana más por cierto...
Ante tal coyuntura, la única solución es: que el Etxebarri vuelva a la senda del triunfo!!

Seoane dijo...

Pues sí, va a ser esa la solución. Podría tener la Federación bizkaina el detalle de ayudar a ganar nuestros partidos, salimos todos ganando xD.
P.D. (ni de coña, hay q ganar por méritos propios)