Segi, segi, segi

Tan importante como saber perder es saber ganar y, es cuando se aprende a ello, cuando de verdad se puede admirar la grandeza de un equipo. Ayer el Artibai volvió a dejar un nuevo capítulo de marrullerismo y antideportividad en el Municipal, no tirando el balón fuera habiendo un contrario en el suelo.
Lo más paradójico del hecho es las airadas quejas de los energúmenos hasta aquí desplazados una vez que, al devolverles el balón de manera deportiva (palabra que en Markina no aparece en los diccionarios), tardamos solo medio minuto en ir a presionarles, entendían que, como les devolvemos el balón, se tiene que acabar el partido ya.
No es de sorprender, no obstante, este comportamiento en pueblos que no han visto un balón ni por televisión, y cuya vida cotidiana se limita a cuidar vacas y comer alubias. De la noche a la mañana se encuentran líderes de Regional y creen que ya tienen un nombre en esto del fútbol.
Os deseo de corazón todas las desgracias del mundo, deportivamente hablando, y aunque no os las desee, acabarán sucediendo, porque sois un equipucho de poca monta.

En cuanto a la noche de carnaval, queda recordar la crítica de ayer, con mención especial para la postdata. Bienvenidas palabras ya que, sin ser una noche especial, rompió la tradición de la lluvia y de los excesos de gente. De lo que si hubo excesos fue de alcohol en algunos casos que, seguro, no tardaréis en reconocer.

P.D. Como gran noticia del día, la retransmisión en abierto y por la Sexta del Zaragoza - Athletic, hecho que se agradece sobremanera un domingo a estas horas, ofreciéndonos la posibilidad de ver a nuestro equipo sin levantarnos del sofá. Gracias Mediapro, nos debíais una.